Con dos ligeras sesiones de corrección culminó la preparación de materiales de la segunda edición del libro de cuentos de Alfredo Pita, “Morituri”, el mismo que conjuntamente con otro volumen, “Extraños frutos”, será presentado esta noche de viernes en la Casa de la Literatura, en la antigua estación de Desamparados, a la espalda del Palacio de Gobierno, precisamente frente al famoso bar “Cordano”, cuyas mesas de mármol sirvieron de escritorio a muchos escritores ilustres por más de una centuria.
Alfredo Pita, nuestro escritor, estará presente esta noche en la Casa de la Literatura Peruana (estación de Desamparados), en Lima.
El haber sido testigo del trabajo concentrado del autor y del corrector del Fondo Editorial UIGV, Nerit Olaya, me colocó en un sitial privilegiado para aprender de dos expertos que expulgaban, línea por línea, las pruebas en la búsqueda de la perfección de un libro que, como toda obra maestra, sospecho que apunta a la eternidad.
La conversación de ambos versaba sobre las aristas del libro, ubicándose en el punto de vista de diferentes personas, ora como el narrador, o su interlocutor, o como el lector, en búsqueda de la claridad del mensaje. Y la tarea era difícil, siendo Alfredo como es, un celendino muy cosmopolita, cuyos personajes, que se mueven en diferentes rincones del mundo, transitan en sus cuentos con su dramas a cuestas pero sin perder su identidad ni sus raíces.
El café “Haití” y los capuchinos con crema fueron testigos del febril y final trabajo, en una carrera contra el tiempo, pues la presentación estaba ya ad portas y el libro aún no estaba listo para la impresión, faltaban detalles de forma, que fueron resueltos en una entrevista final con el editor Lucas Lavado, con quien se vio los elementos de la carátula, en particular la ilustración de la tapa, donde un formidable dibujo del pintor Herman Braun-Vega, una recreación peruana de uno de los “Caprichos" de Goya, sintetiza, a mi modo de ver, el espíritu que trasunta el libro.
Alfredo Pita, a decir de Nilo Espinoza, es el celendino más universal. Sin embargo, esta universalidad no le ha hecho olvidar a su pueblo, del que se siente orgulloso. Está tan plenamente identificado e imbuído de la problemática por la que atraviesa su lar natal, que podemos advertir en uno de los párrafos de su cuento “Flor de Azalea” alusiones dolorosas, como aquella en la que menciona a Villamalia como un pueblo del norte de cuya existencia el narrador ya no está seguro, en clara alusión a la mutilación y destrucción que sufre Celendín a manos de los neocelendinos que ignoran la grandeza de su historia.
Alfredo estará presente en la presentación de sus libros, este 18 de febrero a las 6:00 pm, y creemos que, como celendinos amantes de la cultura, estamos en la obligación moral y material de acompañarlo en esta velada importante para él, pero sobre todo trascendente para nuestra colectividad y para la historia de nuestro pueblo. Porque, hay que reconocerlo, Alfredo Pita es el escritor que ha llevado en alto el nombre de nuestra provincia por los caminos del mundo.
1 comentario:
Sería muy necesario, si el periódico el shilico, en su suplemento, inician colocando la obra de Alfredo Pita, lo recomiendo, para conocimiento de todos los lectores de este buen periódico.
Publicar un comentario