Por Franz Sánchez
Si en realidad, el próximo que quiere dirigir desde el gobierno municipal, el rumbo de Celendín; es un preocupado por la democracia, debiera pensar en lo importante de aliarse con fuerzas políticas convergentes, y si es necesario, desistir sobre su candidatura para dar paso a la unificación de un solo candidato, un único candidato que represente el clamor popular de recoger el pantalón del suelo y abrocharse bien el cinturón por la defensa de los recursos naturales.
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Con un panorama “minado” en la carrera hacia el sillón municipal, habrá más competidores que moto taxistas circulando por las calles. Lo que hace suponer que del apetecible “pastel” que ahora significa Celendín, las rebanadas se repartirán palmo a palmo entre los candidatos.
¿Hay ausencia de líderes en Celendín? No, el liderazgo es de lo que menos se padece, las nuevas organizaciones sociales, de base, gremios sindicales, y diversas formas de organización y liderazgo rural están presentes, pero en las afueras del casco urbano. Y aquí está el problema, porque una vez ya en la ciudad, el resquebrajamiento de las instituciones es más que evidente. El municipio aislado de las fuerzas de bases, sin reconocimiento de un buen porcentaje de la población rural que ha venido luchando infatigable en contra de las empresas mineras “enquistadas” en las entrañas de las reservas acuíferas. Excluidos y postergados, en contra de la adversidad, surge el liderazgo social.
¿Y en la política? Aquí sí, hay una ausencia aberrante de líderes políticos, porque si estos existiesen, ya hubieran convocado a una gran alianza de movimientos, de proyectos, para hablar sobre el tema de no “restar con votos”. Pero esto no ha sido así, pareciera que nadie se echa ni un “ojo”, lo que será fatal, teniendo en cuenta que la principal premisa para un candidato que “gobierne” para las multinacionales, será: “divide y vencerás”
Si las fuerzas democráticas, que en realidad creen en servir al pueblo y no ser servidos por él, apuestan por un Frente Amplio, se le podrá dar una lección imborrable al poder económico y empresarial que sueña con el candidato “ideal”, aquél que no le haga frente a las multinacionales, que reciba “mermelada” bajo la mesa, y a cambio de esto se haga, el que la virgen del Carmen le habla a la oreja.
Uno de aquellos que ya venga con buenas rodilleras, y no tenga asco al olor a pécora de sus mecenas.
Por todo ello, se hace un llamado a quienes en realidad creen en Celendín, no como una excelente oportunidad individual, sino como un nuevo proyecto general que busque el bienestar común, para que se sienten a converger, a concertar, y determinar la importancia de aliar a las fuerzas, ambientales, de izquierda, de centro, de las comunidades, de los obreros, de maestros, trabajadores y trabajadoras, las democráticas, las sinceras... contra el corporativismo despiadado.
Una gran Alianza, un nuevo y único Frente de amplia base, por la tierra, por nosotros, por los que estamos aquí, y por los que vendrán mañana.
Si en realidad, el próximo que quiere dirigir desde el gobierno municipal, el rumbo de Celendín; es un preocupado por la democracia, debiera pensar en lo importante de aliarse con fuerzas políticas convergentes, y si es necesario, desistir sobre su candidatura para dar paso a la unificación de un solo candidato, un único candidato que represente el clamor popular de recoger el pantalón del suelo y abrocharse bien el cinturón por la defensa de los recursos naturales.
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| El pueblo unido reclama unidad d sus dirigentes. |
¿Hay ausencia de líderes en Celendín? No, el liderazgo es de lo que menos se padece, las nuevas organizaciones sociales, de base, gremios sindicales, y diversas formas de organización y liderazgo rural están presentes, pero en las afueras del casco urbano. Y aquí está el problema, porque una vez ya en la ciudad, el resquebrajamiento de las instituciones es más que evidente. El municipio aislado de las fuerzas de bases, sin reconocimiento de un buen porcentaje de la población rural que ha venido luchando infatigable en contra de las empresas mineras “enquistadas” en las entrañas de las reservas acuíferas. Excluidos y postergados, en contra de la adversidad, surge el liderazgo social.
¿Y en la política? Aquí sí, hay una ausencia aberrante de líderes políticos, porque si estos existiesen, ya hubieran convocado a una gran alianza de movimientos, de proyectos, para hablar sobre el tema de no “restar con votos”. Pero esto no ha sido así, pareciera que nadie se echa ni un “ojo”, lo que será fatal, teniendo en cuenta que la principal premisa para un candidato que “gobierne” para las multinacionales, será: “divide y vencerás”
Si las fuerzas democráticas, que en realidad creen en servir al pueblo y no ser servidos por él, apuestan por un Frente Amplio, se le podrá dar una lección imborrable al poder económico y empresarial que sueña con el candidato “ideal”, aquél que no le haga frente a las multinacionales, que reciba “mermelada” bajo la mesa, y a cambio de esto se haga, el que la virgen del Carmen le habla a la oreja.
Uno de aquellos que ya venga con buenas rodilleras, y no tenga asco al olor a pécora de sus mecenas.
Por todo ello, se hace un llamado a quienes en realidad creen en Celendín, no como una excelente oportunidad individual, sino como un nuevo proyecto general que busque el bienestar común, para que se sienten a converger, a concertar, y determinar la importancia de aliar a las fuerzas, ambientales, de izquierda, de centro, de las comunidades, de los obreros, de maestros, trabajadores y trabajadoras, las democráticas, las sinceras... contra el corporativismo despiadado.
Una gran Alianza, un nuevo y único Frente de amplia base, por la tierra, por nosotros, por los que estamos aquí, y por los que vendrán mañana.
¡FUERA YANACOCHA DE CELENDÍN! ¡CONGA NO VA, Y NO VA!
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