Machu Picchu (del quechua machu, viejo, y picchu, cima, es decir, "cima vieja") ha sido considerada una de las maravillas del mundo actual en un concurso organizado en internet. Las viejas culturas precolombinas han sobrevivido a los estragos de la colonización y la república para dar al Perú, como país, y a su población, como sociedad, motivos de aliento y esperanza. Es evidente, algunos aportes del pasado siguen vigentes, pese a todo.
En paralelo tenemos peruanos, o mejor dicho tenemos a un no peruano, por no decir un japonés, que nos da fama mundial pero no por cosas positivas sino mas bien por su alto nivel de corrupción. Alberto Fujimori, hoy preso y esperando su proceso, no sólo fue un dictador abusivo, un genocida y un violador de los derechos humanos, sino también un redomado cleptócrata, mejor dicho un campeón en el arte y el deporte de robar en las arcas fiscales.
Es de preguntarse por qué, cómo es posible, que un país con tanta historia y cultura como el Perú se haya dejado controlar por sujetos como Fujimori y Montesinos, o por su gente, muchos de los cuales siguen aún hoy medrando del Estado, pillándolo, o por un Alan Garcia, individuos con la conciencia y los bolsillos más que cargados.
¿A qué vienen estas digresiones? Pues entérese, a continuación un RANKING de los 10 más grandes cleptócratas del mundo. ¡Gracias al japonés, el Perú figura ahora en un RANKING MUNDIAL, en el de la corrupción...!
Cleptocracia (del griego clepto, quitar, robar; y cracia, fuerza, dominio = predominio de los ladrones, o, si se quiere, reino o sociedad dominada por ladrones) es el desarrollo de un poder basado en el robo de capitales, en general públicos, en la institucionalización de la corrupción y sus derivados (nepotismo, clientelismo, peculado, prevaricación), de modo que los delitos queden impunes, puesto que la corrupción se generaliza en el Estado y la sociedad, y gangrena no sólo el sistema político y económico sino también el judicial. En suma, se habla de Cleptocracia cuando se está ante un gobierno corrupto y ladrón. La Cleptocracia se desarrolla sobre todo en las dictaduras y en Estados y sociedades política y cívicamente débiles como es el caso de algunos países de América Latina, Asia y África.
En paralelo tenemos peruanos, o mejor dicho tenemos a un no peruano, por no decir un japonés, que nos da fama mundial pero no por cosas positivas sino mas bien por su alto nivel de corrupción. Alberto Fujimori, hoy preso y esperando su proceso, no sólo fue un dictador abusivo, un genocida y un violador de los derechos humanos, sino también un redomado cleptócrata, mejor dicho un campeón en el arte y el deporte de robar en las arcas fiscales.Es de preguntarse por qué, cómo es posible, que un país con tanta historia y cultura como el Perú se haya dejado controlar por sujetos como Fujimori y Montesinos, o por su gente, muchos de los cuales siguen aún hoy medrando del Estado, pillándolo, o por un Alan Garcia, individuos con la conciencia y los bolsillos más que cargados.
¿A qué vienen estas digresiones? Pues entérese, a continuación un RANKING de los 10 más grandes cleptócratas del mundo. ¡Gracias al japonés, el Perú figura ahora en un RANKING MUNDIAL, en el de la corrupción...!
Cleptocracia (del griego clepto, quitar, robar; y cracia, fuerza, dominio = predominio de los ladrones, o, si se quiere, reino o sociedad dominada por ladrones) es el desarrollo de un poder basado en el robo de capitales, en general públicos, en la institucionalización de la corrupción y sus derivados (nepotismo, clientelismo, peculado, prevaricación), de modo que los delitos queden impunes, puesto que la corrupción se generaliza en el Estado y la sociedad, y gangrena no sólo el sistema político y económico sino también el judicial. En suma, se habla de Cleptocracia cuando se está ante un gobierno corrupto y ladrón. La Cleptocracia se desarrolla sobre todo en las dictaduras y en Estados y sociedades política y cívicamente débiles como es el caso de algunos países de América Latina, Asia y África.
Ranking de Transparencia Internacional
La siguiente es la lista de Transparencia Internacional de los más grandes cleptócratas internacionales. En séptimo lugar figura el nipo-peruano Alberto Fujimori: [1]
- Ex-presidente indonesio Suharto ($ 15.000 millones - $ 35.000 millones entre 1967 y 1998)
- Ex-presidente filipino Ferdinand Marcos ($ 5.000 millones - $10.000 millones entre 1972 y 1986)
- Ex-presidente zaireño Mobutu Sese Seko ($ 5.000 millones entre 1965 y 1997)
- Ex-presidente nigeriano Sani Abacha ($ 2.000 millones - $ 5.000 millones entre 1993 y 1998)
- Ex-presidente yugoslavo Slobodan Milosevic ($ 1.000 millones entre 1989 y 2000)
- Ex-presidente haitiano Jean-Claude Duvalier ($ 300 millones - $ 800 millones entre 1971 y 1986)
- Ex-presidente peruano Alberto Fujimori ($ 600 millones entre 1990 y 2000)
- Ex-primer ministro ucraniano Pavlo Lazarenko ($ 114 milones - $ 200 millones entre 1996 y 1997)
- Ex-presidente nicaragüense Arnoldo Alemán ($ 100 millones entre 1997 y 2002)
- Ex-presidente filipino Joseph Estrada ($ 78 millones - $ 80 millones entre 1998 y 2001)
Es de hacer notar que la ideología o supuesta ideología, tiene poco que ver para ser cleptócrata, así se puede mencionar a socialistas como Milosevic, o capitalistas como Suharto, ambos considerados grandes cleptócratas.
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